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PRESTADO DE UN BLOG AMIGO ¿ qué opinais al respecto ?

Acho, la que ha armao el Santamaría este, acho. La guerra de los fogones es de las cosas que en los últimos tiempos más me mola del rollo televisivo, sobre todo, porque creía yo ya que estaba la esperanza perdida y los Adriá, Arzak y compañía tenían el tinglao ya montao pa los restos… pero no, salió de un supuesto ostracismo culinario el Santamaría este a darnos cuerda, que por lo visto tiene más estrellas Michelín que Paneque, el payucio, pero se lo tenía callaico así por lo bajini estos años en los que los modernen de modé en el mundo han montao su parafernalia propagandística culinaria vascocatalanística que nos cierra telediarios día si, día también. Porque acho, yo al Santamaría este no le tenía fichao, así que su incursión en el tema ha hecho que protagonice una de las mayores subidas en mi sala de pantallas de ídolos temporales en la historia de mi vida.

 

Así en caliente uno puede pensar que Santi sale a la palestra despotricando incapaz ante el tinglao Bullístico, echando mierda a destajo al verse sobrepasado por la cocina modernen de humos, colores y algas, pero cuando uno se entera un poco más y resulta que don Santi Santamaría es un perrazo viejo en esto y también ha tonteao con lo cuisín a lo sofistiqué, pero defendiendo lo natural, uno empieza a volver a creer en lo que ya daba por perdido... y es que estos Arolas, Arzakes y Adriás, que ahora se requeman a las brasicas, lo que pasa es que empezaron con la tontería, abrieron la veda y a partir de ahí, échale guindas al pavo que lo vistas como lo vistas esto no deja de hacer eurapios en forma de entremeses, postres, segundos y primeros platos, que ni te cuento, y en Nueva York y to, acho. Mucho ha esperado el Santamaría este pa ponerles puntos a las íes, que aquí los amantes de la merluza con limón y aceite de to la vida estábamos ya a punto de entregar las armas y rendirnos a los suflés de humo de berberecho con algas japonesas y sal iodada de Tombuctú con setas venenosas del Himalaya y la hostia cana en verso.

 

Así que sí, cada vez que ponen la imagen latiguillo (se ve que no tienen mucho ande elegir en las teles del Santamaría, por eso de no ser un cuisín del mass media) esa en la que el payucio pasa un pescao de un fregador a otro, yo me caliento casi como si marcara Torres el gol del pase a semis, acho, que don Santi Santamaría es hoy por hoy uno de mis estandartes vitales en un mundo tan importante en nuestros días como es el de la cuisín de restorán, que estoy seguro cien por cien, por cien, acho, que Santamaría votaría más una marinera bien echá, así con su anchoica brillante y su ensaladilla churruclá en la rosquilla perruna, que cualquier pintxo humeante tibetanodonostiarra que luzca en aquellas barras modernen de cierre de telediarios. Porque acho, lo natural, sin más aditivos que los que da una mano generosa de cocinero de to la vida, es lo que vale. Yo Soy de Santamaría. Si fuera rico ya estaría vendiendo la primera partida de camisetas con ese lema y un número 10 así setentero en la espalda. ¿Adriá o Santamaría? Vale.

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8 comentarios

Maikel -

El anterior es mio, perdonad uqe no sepa escribir. ¡Cómo están las piñas!

Anónimo -

Ell tal Santi Santamaría es un nacionalista catalán de tomo y lomo, motivo por el que le deseo que sólo pudiera comer en el resto desu vida de humo de lentejas y guisantes con espuma de aceite de ricino, y todo eso.
Sin perjuicio de lo anterior creo que tiene razón, pero alguien denbería taprle la boca ya que su mensaje lleva a la crispación social. Espero un querella inmediata de Gallardón o de Rajoy, por antipático.

Musti -

Y se me olvidaba. ¿Ya nadie se acuerda de lo delicioso que se comía en Manderley con ese Chef de Primera Línea que es Juanma? ¿Y después, con el Soberbio Suplente Maikel?

"Dale caña, Manolo!"

Musti -

Pues, aunque vosotros me comais vivo, quiero defender al Pisi con su receta de "Arroz a la filipina", que me salvó de morir de hambre en mi piso de la Relampaguito, número 13, 4 D en Almería. ¡Ave Pisi! Cuánto me recordaba de ti al preparar el arroz como le enseñaste a Willy y él luego me dio la receta a mí! Y bueno, la comida sin especias no es nada. La de filetes de pollo a la plancha rociados con sal y orégano que me habré comido en Almería solico y sin brindarle a naiden porque el único que se atrevió a ir a mi pisito fue el Julián y no me encontró. Bueno, los demás ya estaban en Santander, Murcia y tierras aledañas; de manera que se perdona. Además, yo vivía al otro lado del mundo --como ahora. Solamente que no me siento alejado de ninguno de vosotros porque os tengo en mis más queridos recuerdos --aunque suene a culebrón y a novelita de Corín Tellado. Que una cosa es recordar con pose de estatua y otra es la que te sale del fondo de las entrañas. Como dice Alfredo: "¡Ave maulas!" y yo añado el histórico cierre: "Los que van a morir te saludan".

Escribe el Musti.

Angel -

Jejeje los "espaguetis a la cántabra". Por no hablar del arroz tres salchichas de Pizzi.

Fredy, no se me va a olvidar en la vida la fuente de spaguettis con cayena que te metiste entre pecho y espalda una noche en Manderley. Aquello era fuego.

Las especias son la vida Willy. El Maikel sigue haciéndose bocadillos con tabasco, ajo, aceite...

En el tema Santamaría-Adriá...yo también me quedo con la cocina tradicional, aunque entiendo que la otra tenga su público.

Yo me hago un menú de degustación en los Hermanos Padilla en Lorca por 12-14 euros. Y no lo cambio por las excelencias de El Bulli.

Alfredo -

Muy agudo Willy.
Aunque para puristas " los espaguetis a la cantabra " Ingredientes un kilo de espaguetis, 2 litros de agua y para de contar.

Willy -

Pero se admiten las especias en esa que denominas "cocina tradicional"? Me gustaría conocer la opinión de Pisi al respecto. Para purismo culinario en el Norte, como la paella a la cántabra... La cocina murciana abusa de las salsicas y las especias, no crees?
A ver si metiendo un poco de caña aparecen el resto de tiburones del foro...

Alfredo -

Lo he colgado yo chicos, siempre se me olvida firmarlo, aunque en este caso viene bién porque el texto no es mío, es de unos amigos murcianicos.
Si, que adelanto que coincido totalmente con lo que afirma el autor del post. A saber : Los ingredientes de primera calidad se pagan al precio que el mercado fije. Hay que volver a las raices de la cocina. Y defiendo la cocina hecha " a lo antigua ". Con las cosas de comer no se juega, los experimentos con gaseosa. A ver si se enteran Ferrán Adriá y cia.